Aparecen noticias en la prensa de una epidemia por un nuevo tipo de coronavirus. En concreto originada en una provincia del centro de la China, Wunan -por cierto lugar de nacimiento de Mao Zedong-, donde se han detectado más de 40.000 infectados y 908 personas fallecidas a día de hoy (10-2-2020). El punto de origen sería un mercado de pescado y marisco y los primeros casos detectados serían trabajadores del mercado, o visitantes habituales del mismo.
El virus fue secuenciado genéticamente de modo muy rápido, según informaron el 12 de enero las autoridades sanitarias chinas.
¿Puede trasmitirse fuera de China? Pues sí. De hecho ya se han detectado casos en 28 países, con punto de partida en personas que habían viajado a Wuhan; desde luego la globalización, con los viajes aéreos, permite el rápido contagio de virus y microorganismos. Hay que saber que en Wunan hay industrias europeas, sobre todo francesas. De momento la OMS no ha aconsejado medidas específicas de salud para las personas que viajen a China
¿Que son los coronavirus?
Una familia de virus que tienen unas prolongaciones que forman una especie de corona, de ahí su nombre. No solo afectan al hombre pues pueden provocar también diversas enfermedades en animales.
Todos hemos estado en contacto con otras cepas de los coronavirus pues son, después de los rinovirus, la causa más frecuente de los resfriados comunes, pero algunas cepas pueden provocar neumonías severas que pueden llegar a causar la muerte.
El origen del virus se sitúa en los murciélagos y como huésped intermedio, entre estos y el hombre, se pensó inicialmente en la serpiente pero ahora parece que se trate del pangolín (mamífero de piel escamosa) dado que el genoma de los coronavirus que albergan son similares a las detectadas en los pacientes.
El origen del virus se sitúa en los murciélagos y como huésped intermedio, entre estos y el hombre, se pensó inicialmente en la serpiente pero ahora parece que se trate del pangolín (mamífero de piel escamosa) dado que el genoma de los coronavirus que albergan son similares a las detectadas en los pacientes.
Imagen de www.deia.eus/vivir-on/ciencia-y-tecnologia |
En 2002-2003 se produjo un brote epidémico, conocido como SARS (Severe Acute Respiratory Syndrome, en español Síndrome Respiratorio Agudo Grave) con producción de neumonía severa que originó 8098 casos con 774 fallecimientos. El foco de origen se situó en China y se atribuyó a una estirpe de murciélagos, los murciélagos de herradura, desde estos el virus pasó a un mamífero carnívoro, la civetas y luego al hombre. No se han vuelto a detectar casos de SARS desde 2004.
En el año 2012 apareció en Arabia Saudí otra variante de coronavirus, que originó el brote conocido como MRES (Middle East Respiratory Syndrome, en español Síndrome Respiratorio de Oriente Medio) y que luego se propagó a otros países con un total de 1773 casos y 678 fallecimientos (o sea, mayor mortalidad que el SARS). Los síntomas son fiebre, dolores musculares, escalofrios, luego tos seca, disnea y aparecen focos de neumonía. Una cuarta parte de los pacientes presentan vómitos, diarrea o dolor abdominal.
Hay que recalcar que en los niños no tienen estos procesos tanta gravedad como en los adultos.
Desde los murciélagos los coronavirus habrían pasado a los camellos y de estos al hombre.
¿Cómo se previene?
Por similitud con todos los virus de diseminación respiratoria probablemente se diseminan con la tos y los estornudos o al contacto de la mano con superficies contaminadas. Contra lo que suele creerse la boca no es el punto de entrada principal sino los ojos y la nariz.
Por tanto para la prevención higiene estricta de manos, estornudar en codo, o en pañuelo que debe desecharse inmediatamente, y para máxima protección mascarillas e incluso gafas protectoras.
Fuentes para esta entrada.
Artículo de El Mundofechado hoy 20-1-2020
Englund J, Kim YJ, McIntosh K. Human Coronavirus. En:Textbook of Pediatric Infectious Diseases. Feigin and Cherry´s. Pags 1846-1853. Eighth Edition. Elsevier 2019.
Poutanen SM. Human CoronavirusesEn: Principles and Practice of Pediatric Infectious Diseases. Fifth Edition. Pags 1148-1152. Elsevier 2018.
www.who.int
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