Botulismo en lactantes: ¡Cuidado con la miel!

Todavía apareciendo casos de Listeriosis (pueden leer una entrada al respecto utilizando este enlace  http://bit.ly/2TWzLfs) cuando aparece una nueva alarma con 4 casos de botulismo en Castilla y León

Les explico de que se trata y como proteger a los niños de esta enfermedad que puede llegar a ser mortal.

El responsable es el Clostridium botulinum, bacteria que se encuentra frecuentemente en el suelo en forma de esporas, y por tanto en vegetales, frutas frescas y asimismo en la miel; también se encuentra en los sedimentos acuáticos. 

www.cfs.gov.hk

Las esporas son como semillas (eso significa "espora"), donde la bacteria está  durmiente y que en las condiciones del estómago del lactante pequeño (con poca acidez gástrica) se desarrollan liberando las bacterias que sueltan su toxina, que posteriormente pasa a sangre y afecta a estructuras del sistema nervioso relacionadas con los músculos (unión neuromuscular), pudiendo llegar a matar al bebé al producirse diversas parálisis. Esta toxina es de las más potentes conocidas. Hay que recordar que en dosis pequeñas se usa en Medicina Estética, el "Botox", y también en Fisioterapia y Neurología para pacientes con espasmos musculares severos.

El botulismo puede producirse de varias formas:

1.-Por ingestión de alimentos contaminados que contienen la toxina (como los casos aparecidos recientemente). Adultos y niños mayores que ingieren las esporas no desarrollan normalmente la enfermedad. Las toxinas normalmente no resisten el calor  pero las esporas frecuentemente sí.

2.-Por heridas y tatuajes realizados con materiales contaminados.

3.- Por error profesional con uso inadecuado de dosis excesivas de toxina botulínica.

4.- Por inhalación de esporas que son muy pequeñas y pueden estar suspendidas en el aire; se ha relacionado con obras cercanas, rehabilitación del hogar, actividades agrícolas y ganaderas, aunque todo ello infrecuentemente.

5.-La más preocupante para nosotros es la que ocurre en niños pequeños, menores de 1 año, por ingestión de  las esporas del Clostridium botulinum.

A veces causada por ingestión de miel, que  se les ofrece en el chupete para que no lloren, y que contiene esporas aportadas por las propias abejas o por el polen. Hay que saber que es difícil eliminar las esporas de la miel sin modificar el sabor del producto.

Se ha relacionado algún caso con infusiones de especies vegetales para bebés. Sin embargo la mayoría de las veces no llega a conocerse de donde procede el contagio. En España se detectan  pocos casos pero puede que algunos no se diagnostiquen adecuadamente.

Formas de adquisición del botulismo.
www.infection.az

Síntomas:

Pérdida de expresión de la cara, caída de párpados (ptosis), pérdida de tono muscular (hipotonía) con incapacidad de bebé de sostener la cabeza, letargia, rechazo y dificultar para la alimentación, estreñimiento. Lo normal es que no se presente fiebre, lo cual dificulta pensar en un proceso causado por una bacteria. El proceso de parálisis prosigue 1-2 semanas y luego mejoran lentamente.

En ocasiones se desarrolla la enfermedad de modo catastrófico, como muerte súbita del lactante

Bebé incapaz de sostener su cabeza o
enderezar su espalda (sin tono muscular) www.labsroot.com

El diagnóstico definitivo se consigue detectando la bacteria y toxina  en las heces y en la posible fuente de infección.

Tratamiento:

Por suerte disponemos de una antitoxina para los adultos, y una inmunoglobulina humana para niños, ambas para tratamiento intravenoso, que salvarán la vida del paciente. Este será monitorizado estrechamente y además recibirá cuidados generales como respiración asistida si es preciso (por las toxinas ya impregnadas y que tardan en desaparecer), alimentación por sonda, etcétera.

Los antibióticos pueden ser perjudiciales pues pueden ocasionar que la bacteria elimine más toxinas y solo se administran si hay complicaciones infecciosas como neumonía.

Conviene saber que los pañales del bebé pueden contener la toxina y esporas por lo que se manejarán con extrema precaución.

Prevención:
No dar miel a los lactantes y mantener higiene máxima de manos y alimentos. Tampoco se debe permitir que los niños pequeños coman tierra.

www.foossafetynews.com

Fuentes para la elaboración de esta entrada:
Khour JM, ArnonSS. Infant botulism. En Feigin and Cherry´s Textbook of Pediatric Infectious Diseases. Edited by: Chery JD, Harrison GJ, Kaplan SL, Steinbach WJ, Hoetz PJ. Eigth Edition. Elsevier. Philadelphia 2019.
Long SS. En: Principles and Practice of Pediatric Infectious Diseases. Edited by: Long  SS, Prober CH and Fischer M- Fifth Edition. Elsevier, Philadelphia, 2018.
Informe del Comité Científico de la Agencia española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) sobre el botulismo infantil. www-aecosan.msssi.gob.es, consultada 1 de septiembre 2019.